Tras reconstruir en sus obras el avance del bando nacional y la represión en Huelva, Sevilla y Badajoz, el historiador Francisco Espinosa lleva a las librerías Callar al mensajero (Península), donde documenta 12 casos de víctimas del franquismo, testigos, documentalistas o historiadores cuyas voces fueron silenciadas en plena democracia, en ocasiones con la complicidad del Estado.
¿Sigue habiendo tabúes sobre la represión?
Sí, pero se han roto muchos. Ya desde ante del inicio del movimiento de memoria, hubo desde los 80 varias investigaciones importantísimas, porque constituían el acta de desaparición del abuelo, el padre...
¿Garzón quiso entrar en un jardín prohibido?
Es evidente. Pero su intento tiene un mérito: puso en términos jurídicos lo que estaba dicho en palabras de historia sobre lo ocurrido tras el 18 de julio. La justicia se ha quitado la careta, como cada vez que ha hecho falta. Ya lo hizo con Ruiz Vergara [autor de la película Rocío, censurada por el Supremo en el 84]. Entonces era abiertamente franquista. Ahora, aunque disimulado, tiene un núcleo conservador.
¿Hay miedo en la derecha a deslegitimar el franquismo?
La derecha española no puede ser como la alemana porque tiene conciencia de ganadora. A diferencia de Alemania, Italia o Austria, en España el fascismo ganó y se perpetuó, controlando la transición mediante el ejército. Aquí se ha logrado evitar que Garzón demostrase la criminalidad del franquismo con la lógica jurídica.
¿Cree que no hubo un cambio democrático real?
¿Cuándo? Franco murió en el 75. ¿Fue entonces, o en el 78? ¿Fue con la Constitución, con el harakiri de las Cortes? No hay punto de cambio. La gente se quita la camisa azul, se pone la otra y se presenta como demócrata de toda la vida.
¿Lo atribuye al vínculo familiar de la clase política con el franquismo?
Pero eso pasa a todos los niveles, y mientras a un nivel más alto te muevas, más. ¿Quién estudiaba en España? La mayoría era de familia burguesa, es de cajón. Mira la judicatura. La mayoría, incluso de los que hemos investigado la represión, somos de familias de derechas. Incluso los jueces progresistas lo son.
¿Ha hecho mella en la percepción de la historia el repunte del revisionismo?
No sé dónde hubiera llegado si el PP gana en 2004, porque tras los primeros síntomas a finales de los 90, en 2000 se quitaron la careta con una recuperación del franquismo y una crítica absoluta de la experiencia democrática republicana, sirviéndose de propagandistas como Pío Moa o César Vidal.
¿Qué suscita su interés por las voces acalladas, recogido en Callar al mensajero?
Es algo que conocemos de sobra los investigadores. Recuerdo el impacto que produjo la película Rocío, de Fernando Ruiz Vergara. La pantalla se quedaba en negro varias veces por una sentencia de 1984 Supremo que obligaba a suprimir las partes en que se identificaba a José María Reales, con nombres y apellidos, como el principal represor en Almonte. En cuanto empezó a circular, su familia, de terratenientes, lo cortó.
Usted tuvo problemas para presentar La justicia de Queipo en Sevilla. ¿Hubo ocultación?
Hubo un deseo de no presentarlo. Fue un libro que hice con materiales del archivo militar, abierto en el 97. Los pocos historiadores que entramos vimos que lo que había era impresionante. Por entonces, el archivo no ponía trabas de acceso, algo impensable. Cuando lo leíamos entonces, pensábamos: Esto nunca va a salir. Al final busqué una imprenta y lo edité yo mismo. Para presentarlo, contacté con la Casa de la Provincia [Diputación]. Primero parecía que sí, pero al final lo leerían y no les haría gracia, supongo. Empezaron a darme largas. Y no se presentó. En 2006 lo recuperó Crítica.
¿Existe suficiente libertad de acceso a los archivos?
Se ha abierto mucho, pero falta una política archivística racional. Cuando incorporaron archivos militares a la estructura civil, permitieron que los siguieran controlando los militares. Sigues dependiendo de ellos.
¿La Iglesia ha aportado su información disponible?
Por la Ley de Patrimonio Documental, debería. Pero hay un problema: la documentación la controlan y catalogan ellos, y no personal del Cuerpo de Archiveros del Estado, que para eso está. De la otra forma, cuando hay un papel delicado, lo ponen en la caja B. O lo pueden quemar perfectamente.
ENTREVISTA A FRANCISCO ESPINOSA
¿Qué clase de transición fue aquella donde los herederos de la dictadura se quedaron con el poder y el dinero? De esta manera, en cuanto llegaron al poder de nuevo, enseguida comenzaron a revisionar la historia y a lavar la cara del franquismo. Con el apoyo de la iglesia, que se dedicaban a beatificar mártires, mientras las trabas de los herederos del golpismo han hecho todo lo posible para evitar que miles de personas -que ya han muerto- pudieran sacar a sus familiares de las fosas, para recuperar y honrar su memoria.
Y ahora, con los fachas nacional católicos crecidos, pasa lo que pasa:
El Opus Dei está detrás de proyecto Genia
El proyecto GENIA se desarrolla en cuatro niveles, a partir de 5º de Primaria. En cada uno de ellos se imparten 4 materias, Entorno familiar, Estudio/Cultura, Hogar y Protocolo, a las que se dedica una sesión mensual. El protagonismo es asumido por las madres, que apuestan por invertir en familia y en educación, formando a sus hijas para que armonicen la especialización en la propia profesión, con la ética del cuidado de la persona y la dignidad del servicio. Conseguir los objetivos del Proyecto precisa, además, de la colaboración con éstas de monitoras especializadas en las distintas áreas.
Algunas de las materias para las chicas genia:
- Conservación y mantenimiento de la casa II: paso la mopa o barro, ¿por qué me decido?
- En un plis plás: La limpieza del calzado
- Conservación y mantenimiento de la casa III: En qué detalles me fijo para dejar bien una habitación
- Cómo hacer una cama sin arrugas
- Comportamiento en lugares públicos I: En la calle y esperando turno en una fila
- Mantener ordenado el armario
- El cuidado de los niños
- Comportamiento en la mesa I: Comportamiento durante la comida
- Habitaciones y baños comunes
- ¿Cómo se pone la mesa?
- Comportamiento en la mesa III: servir la mesa
- Distintas formas de presentar las servilletas
- Cómo se plancha una camisa
- Cómo hacer la compra
- El cuidado de los ancianos
- Urbanidad en la piedad: el nombre de Dios, la oración vocal, las personas consagradas, los objetos bendecidos
- Cómo hacer una tortilla de patatas
- Conservación y mantenimiento de la casa I: Cómo se limpia un baño
- Comportamiento en la mesa II: Uso de lo cubiertos
- Cómo comportarse en la iglesia: En el templo, la Liturgia, la Santa Misa
Ya están aquí.